Transcripción de Presentación de Almandino 01 (2019) por Jorge Yangali, María Teresa Zúñiga y Hugo Velazco:
Almandino 01, comentarios de Hugo Velazco Flores
Cuando Almandino llegó a mis manos quedé bastante sorprendido porque no esperaba una edición tan atrevida; para empezar, en el formato se percibe la artesanía y el trabajo manual. Este cuaderno de antología ha sido hecho a mano, desde el contenido hasta la cubierta. Como producto tiene un calor hogareño y ha sido elaborado con el cariño que se merecen los poetas que están en la primera edición.
Mucho se puede hablar sobre ellos, sobre sus corrientes y escuelas en las que inscriben sus estéticas y sus formas de hacer poesías, son sumamente variados y a todos los conozco, los he visto y leído. Así, como bien se menciona en el prólogo, se nota con claridad los dos momentos. En el primero son los integrantes de UYAY que aparecen con su propuesta estética todavía muy relacionada con la Cofradía En Blanco que pretendía una estética que miraba hacia lo andino, las raíces y la valoración de nuestra cultura. En la segunda parte se observa a un grupo de poetas de procedencia muy diversa, la mayoría de ellos han venido de grupos poéticos que los primeros años de este siglo, entre los 2000 a 2010 más o menos, quienes ya habían hecho un trabajo más activo en la poesía aquí en la región Junín; por ejemplo, Gabriel tiempo o Albert Estrella que vino de Cerro de Pasco en una especie de fusión con la poesía del famoso grupo NN y que tenían bastante relación con poetas de aquí de Huancayo. Entre los años 2010-2012 trabajaron bastante y publicaron un sin número de revistas, recuerdo, por ejemplo, al grupo Eclosión de Nelson Aliaga que recogía la poesía de escritores de del Instituto de Chupaca, incluso organizaron un congreso de poesía joven. Recuerdo también la revista del desaparecido Jim Ramos: Mayucha, que tuvo bastante presencia aquí y que llegaron a publicar un par de plaquetas. Cuando estaba en la universidad, recuerdo al grupo que integré, que al principio tenía una orientación muy similar a UYAY con una mirada hacia lo andino, se llamaba Palestra, aunque tenían intenciones más políticas por lo que decidí a apartarme después, ellos publicaron varios números de la la revista Calato, que era una revistas objeto, donde se tenía que descubrir la forma, a veces se leía de atrás para adelante. Más adelante, apareció el grupo Dos Amarus, que todos conocemos, y su famosa revista Estepario que en su mayoría recogió buena parte de las voces nuevas de la literatura de Junín: en narrativa, ensayo y poesía. Hubo otros grupos más, incluso grupos femeninos que habían en la universidad, que tenía una propuesta bastante interesante, sólo hecho por mujeres. Así, en Huancayo hubo una movida literaria importante a cargo de poetas que estaban buscando una voz. Asimismo, hubo presencia de escritores huancavelicanos, aunque ellos corresponden a otra etapa.
Hoy quienes están, de alguna otra forma, sobreviviendo en su compromiso con la poesía, son quienes están aquí en la antología Almandino, por ese motivo me parece que es muy valioso.
Cuando termina el 2012, la cantidad de actividades culturales desciende, ya no se publican revistas con constancia. De entre todas las revistas, plaquetas, poemarios y antologías sólo quedará hasta hoy día Estepario; y los demás poetas simplemente han ido cada quien por su camino mientras los grupos se han desintegrado. Hoy quienes están, de alguna otra forma, sobreviviendo en su compromiso con la poesía, son quienes están aquí en la antología Almandino, por ese motivo me parece que es muy valioso. Estos poetas han encontrado un estilo propio, al leerlos ya se identifica un trabajo bastante serio, maduro, comprometido y un dominio complejo de la palabra y la poética, yo creo que ellos en el futuro nos entregarán obras y libros contundentes que queden para la posteridad como una muestra indiscutible de su presencia y de su trabajo poético aquí en la Región Junín y en el país. Esta antología es un trabajo valioso que fortalece la tradición poética, retomando lo que han hecho nuestros insignes poetas del pasado, como poco Clodoaldo Soto y el gran poeta olvidado Armando Castilla, a quién conocí en sus últimos días. Este cuaderno reúne una gran variedad de voces que se están fortaleciendo en estos años, yo soy un convencido que varios de ellos, que están aquí, nos van a entregar libros muy valiosos y quedarán en la posteridad en la literatura de Junín.
Estos poetas han encontrado un estilo propio, al leerlos ya se identifica un trabajo bastante serio, maduro, comprometido y un dominio complejo de la palabra y la poética, yo creo que ellos en el futuro nos entregarán obras y libros contundentes que queden para la posteridad como una muestra indiscutible de su presencia y de su trabajo poético aquí en la Región Junín y en el país.
Lo que me llamaba la atención, recuerdo una anécdota con un periodista argentino en Ayacucho cuando presenté una antología personal de cuentos, él me dijo que «no existe una antología personal», yo me recordé del gran Borges, ¿Cuántas antologías tiene Borges?. Pero el periodista me decía que yo estoy equivocado y que no existen las antologías personales. Aquí yo me preguntaba si será posible que un grupo haga su propia antología, bajo qué criterios. Yo sí creo que existen las antologías personales definitivamente. Conozco el trabajo total de los poemas de Albert Estrella y Gabriel Tiempo, de quienes presenté poemario y me enviaban sus escritos inéditos, también conozco el trabajo de Jesús Santibáñez, compañero mío en la universidad, y de Clinton Landeo, de quién edite dos libros. Todos tienen material poético antalogable. La poesía a partir del 2000 en adelante es importante para ser estudiada porque está todavía en evolución.
Por un Perú culto maravilloso para vivir las letras son la vida misma ahora y siempre